En futbolistasaxem.com el más pinino mas de futbolistas argentinos por el mundo, Nacido el 31 de enero de 1986 en Guerrico, partido de Pergamino, Adolfo José Hirsch hizo sus primeras armas en el fútbol en su pueblo. Años más tarde armó la valija, la llenó de sueños y como hacen miles de chicos del interior, partió a Buenos Aires, más espicíficamente a Banfield, donde hizo las inferiores. De regreso en su pueblo natal pasó por Juventud de Pergamino y Conesa FC para por obra del destino terminar en San Marino, donde primero vistió la camiseta de Virtus Acquaviva y más tarde la del Cosmos, su club actual, donde comparte plantel con los argentinos Christian Rubén Menin y Cristian “Kily” Maccagno. En la siguiente nota, el argentino hace un repaso de su vida en San Marino y sueña con estar en esa Selección.
¿Cómo surgió la posibilidad de emigrar a San Marino?
A San Marino llegue en el 2009, tenía amigos jugando acá (Danilo Rinaldi) y trabajando, me comentaron un poco cómo era todo y decidí venir a probar suerte acá. Mi primer equipo fue Virtus Acquaviva y ahora estoy en Cosmos, un club modesto, que hace varios años está creciendo y tiene pretensiones de ganar el campeonato local o la copa de San Marino.
¿Con qué costumbres te encontraste cuando llegaste al país?
Acá es muy distinto a Argentina, las costumbres son parecidas, pero el país es distinto, no hay robos, ni delincuencia y todo es accesible. La gente es muy respetuosa, pero muy reservada, cada cual hace su vida.
¿Cómo te manejás con la comida y el idioma?
La comida no es muy distinta, se come mucho pescado y pastas, pero en casa comemos siempre como en Argentina (risas). El idioma fue complicado al principio, ahora ya le agarré la mano, se complica si te hablan en dialecto.
¿Cómo es el fútbol y qué diferencias hay con el argentino? ¿Cómo es el público Sanmarinense?
El fútbol es más lento que allá, se pega menos, y es mucho más táctico. Se juega en canchas de césped sintético, asi que técnicamente es mejor y se equivocan menos. La pelota pica siempre bien. Acá hay muy poco público, la gente no sigue tanto el fútbol y no hay esa pasión que hay allá. En los partidos importantes se ve más gente, o cuando empieza el calor; en invierno no va nadie.
¿Alguna anécdota graciosa que recuerdes?
La que siempre me acuerdo es una en un partido de Copa en el que perdíamos 5 a 1 y nos estaban pegando un buen baile. El árbitro no nos cobraba ni una y ya nos había echado a un jugador y al técnico. En una jugada me voy mano a mano con uno, lo paso y me agarra la camiseta. Me paro pensando que me iba a cobrar algo y nada, me di vuelta y lo insulté pero en español, le dije hijo de buena madre, pero se ve que las puteadas en español las sabía bien. Me echó y me comí tres fechas (risas).
¿Cómo te fue en la útlima temporada?
El campeonato ya termino acá, nos fue bastante bien, llegamos a los playoffs de Campeonato y de Copa, pero no pasamos las semifinales. En lo personal también fue positivo, me perdí mucho por la fractura, y cuando volví tuve algunas lesiones, derivadas de la fractura, pero nada grave. Esperemos arrancar al 100% el próximo campeonato.
¿Te entusiasma la posibilidad de algún llamado de la selección de San Marino?
En la selección ya jugué un amistoso contra Rumania, hice varias entrenamientos también, después me desgarré antes de unos partidos por la clasificación al Mundial y cuando volví el año pasado a entrenar me quebré el húmero en un partido. Me perdí varios partidos pero este año espero volver. Para nosotros la selección es lo mejor que nos pudo pasar, son posibilidades que las tienen muy pocos en la vida, es siempre un gran estímulo que tenemos. Espero volver a jugar.
¿Qué imaginás y anhelás para el futuro?
Seguramente que quiero ganar un campeonato, tratar de mejorar en todo y seguir creciendo como jugador y persona.